Lab

Stone Island se creó en 1982 en Ravarino, una pequeña ciudad de la provincia de Módena, en el norte de Italia, donde la marca ha llevado a cabo su continua exploración de la transformación y el ennoblecimiento de las fibras y los tejidos, así como su impacto único sobre la prenda acabada. Estos experimentos han llevado al descubrimiento de materiales y técnicas de producción nunca antes utilizados en la industria de la confección, incluido el desarrollo de más de 60 000 fórmulas de tintes diferentes.

La autenticidad es un valor intangible que se consigue a través de lo tangible. En el caso de Stone Island, el producto es el resultado de un incesante espíritu de experimentación y desarrollo. Es lo que confiere a la marca su ADN inconfundible, y lo que la ha mantenido a la vanguardia del diseño de moda durante más de cuatro décadas. Todos estos experimentos tienen lugar en los centros de diseño de Stone Island en Ravarino, Italia. Internamente se les conoce como "The Lab", para dar a entender que el trabajo de diseño de Stone Islandtiene más en común con la ciencia que con la moda. 

Stone Island desarrolla sus propios tejidos en The Lab, algunos de los cuales, como Nylon Metal y Tank Shield, se han convertido en elementos básicos de la marca. Stone Island se refiere a estos avances como "investigación en tejidos". A menudo, el tejido dicta el resto del proceso de diseño. No hay material que no merezca la pena explorar; así es como se consiguen chaquetas fabricadas con una lámina 100 % de acero inoxidable que normalmente se utiliza para revestir las cabinas de los aviones.

Stone Island lleva a cabo rigurosos controles de calidad durante todo el proceso de producción, comenzando por el departamento de CQT (Controllo Qualità Tessuti or Raw Material Quality Control), que se encarga del desarrollo y el control de calidad de los tejidos desde el inicio hasta la producción a granel de las piezas acabadas. En el departamento de CQT también se calculan los encogimientos de todos los tejidos para que el departamento de patronaje disponga de las proporciones correctas tras el teñido de las prendas a temperaturas elevadas. 

El denominado "Trouble-Shooting Lab" es el laboratorio físico y mecánico en que la compañía analiza, controla y supervisa aspectos relacionados con la calidad y el rendimiento de los materiales al combinarlos con tintes y tratamientos como la reacción a la luz, el sudor, el roce, el desgarro o el lavado, así como con técnicas de elaboración de prendas.